CÓMO HACER GACHAS MANCHEGAS CON MARISCO
Nuestras gachas de pitos, titos, almortas o guijas, son el mejor ejemplo de gastronomía social en muchas zonas de La Mancha. Presentes en reuniones familiares, tapas de bares e incluso en la carta de muchos restaurantes.
En toda Castilla-La Mancha su consumo, más allá de lo riquísimas que están, es muchas veces la excusa para la reunión de amigos en torno a la sartén. Compartir unas gachas, no es cualquier cosa, es símbolo de hermandad y rencuentro.
CÓMO SE DEBEN COMER LAS GACHAS MANCHEGAS
Comer gachas ha de hacerse siguiendo unas normas perfectamente tipificadas:
- Deben comerse en la sartén en la que se han cocinado. “Se duda de la virilidad de aquel que prefiere hacerlo en plato”.
- Si se enfrían no hay quien las coma. Hay que comerlas pues, recién retirada la sartén, dependiendo de la capacidad de cada uno para aguantar el calor.
- Aunque está permitida la cuchara, la forma ortodoxa de comerlas es utilizando lascas de pan, del día anterior, cortadas aerodinámicamente con la navajilla.
- La zona de inmersión de cada comensal se delimita con un arco imaginario y no se deberá invadir la parte de tu vecino en el corro. Esta norma da lugar al celebre dicho de: “No me jodas Baldomero, come gachas por tu lao, que me dejas los miejones y te comes lo pagao”. Lo “pegao” en los bordes de la sartén, como en la paella, suele ser lo más sabroso.
- La bota de vino circulara sin descanso de mano en mano.
Aunque para su elaboración, “cada maestrillo tiene su librillo”, aquí vamos a sugerir nuestra forma personal de hacerlas, cambiando la típica panceta, chorizo, hígado, etc. por un poco de MARISCO. Si a usted la salen bien las gachas, con esta receta, triunfará seguro.
RECETA DE LAS GACHAS MANCHEGAS
Ingredientes para cuatro o seis personas: 6 gambones o carabineros, 250 gr. de gamba arrocera, 250 gr. de anilla de calamar o sepia, 3 dientes de ajo, 2 pimientos secos y una cucharada bien colmada de harina por cada comensal, aceite de oliva virgen extra, y si usted quiere un toquecito de cayena.
Se pela el marisco y se hace un fumet con las cabezas.
En la sartén donde las vamos a comer, se fríen los ajos pelados y los pimientos secos, con mucho cuidado de que no se quemen. Una vez fritos y crujientes, los batimos con un poco de agua con la batidora eléctrica. (Pequeño atajo con resultados óptimos).
En el mismo aceite, se sofríen las gambitas peladas, los gambones y el calamar. Reservaremos parte de ello para después decorar, antes de añadir la harina para que se tueste. Removemos la harina para que no se queme y quede suelta, hasta que adquiera un tono dorado.
Ese será el momento de añadir el agua con el ajo y el pimiento rojo y parte del fumet que habíamos obtenido al cocer las cabezas de las gambas. Para evitar la formación de grumos el agua deberá estar fría.
Removemos sin parar hasta conseguir la textura deseada, cuando hacen “chup-chup”.
¡¡¡ BUEN PROVECHO !!!